Es evidente que la humanidad ha perdido su camino entre la actual amalgama de ruido y discordia. La única salida a esta situación pasa por llevar la consciencia del ser humano a algo más elevado que él mismo. Cómo conseguir esto es el tema de la, hoy bien conocida, filosofía de G. I. Gurdjieff, quien sostenía que el comportamiento del hombre no es consciente, pero puede llegar a serlo si consigue soltarse de las trabas representadas por sus asociaciones habituales y mecánicas. Las ideas de Gurdjieff no se deben contemplar como una especulación abstracta, sino que deben aplicarse a la vida diaria, de este modo enriquecen considerablemente el significado y el aprovechamiento de la existencia. La participación consciente en los eventos de cada día tiene un valor mucho más allá del puramente personal, pues contribuye a aumentar de alguna forma el depósito total de consciencia cósmica y a compensar las fuerzas negativas generadas por la codicia y el egoísmo humanos. Las charlas seleccionadas en este libro facilitan la interpretación práctica de muchos de los aspectos del vivir consciente de cada día.
Fecha de publicación: 10-12-2010